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Los vecinos de Alcolea continúan reviviendo la tradición año tras año en un día que se ha vuelto una fiesta local, atrayendo a vecinos y transeúntes a recorrer el municipio para descubrir los monumentos instalados en los barrios de los vecinos participantes.
Las calles se llenaron de vida con 12 tronos que incluían detalles con décadas de historia, mantoncillos, máquinas de coser, balizas, morteros, mobiliario y decoración que dejaba a los curiosos con la boca abierta.
No solo se celebró la fiesta en Alcolea, en las pedanías de Lucainena y Darrícal también se expusieron cuatro altares, dos en cada pueblo con decoraciones florales de gran magnitud donde los vecinos vivieron la fiesta con un día soleado lleno de alegría y folklore.
Cada Cruz tenía su esencia, decoradas con flores, bastoncillos, nubes de algodón o pompones, cada grupo le daba a su altar un sentido diferente. Encontrando, a lo largo del recorrido, altares atípicos como el de la puerta del colegio CPR Alcolea - Fondón, inspirado en el famoso juego de Nintendo, Mario Bros; o una calle que no solo decoró su altar sino el barrio al completo, transformando los balcones y esquinas en un jardín botánico.

Durante el recorrido oficial, las autoridades municipales acompañadas del Grupo de Música Zaharagüí amenizaron cada Cruz con canciones y palmas, además de una degustación de jamón, habas, pan y vino casero cortesía del Ayuntamiento de Alcolea.
Tradición y vanguardia, en un municipio volcado en mantener vivas las fiestas, donde además de la instalación de altares, la jornada también estaba protagonizada por diferentes actividades como un baile a caballo, juegos e hinchables para los pequeños, una paella popular y la instalación de una barra a cargo de la Asociación de Mujeres ‘Alcolea Pequeña Fortaleza’, en el centro cultural Zaharagüí el cual estuvo amenizado con música hasta altas horas de la madrugada.
Rosas, flores, mantoncillos y la Cruz como protagonista en una jornada primaveral que tanto jóvenes como mayores mantienen viva año tras año.
Redacción. Sara Caracoche Velázquez. 05/05/2025